El “refresco” de hoy saca a la palestra tres palabras, de la misma familia, que no pueden ser utilizadas de cualquier manera…
Improvisto/a. Es un adjetivo. Significa que algo no está previsto. Esta palabra se utiliza en la locución adverbial A la improvista, que, aunque ya no se utiliza mucho, significa “hacer algo sin haberlo pensado o previsto”.
Improviso/a. También es un adjetivo. Y también significa que algo no está previsto. Esta palabra se utiliza en la locución adverbial De improviso, cuyo significado conocemos todos: “de manera imprevista”, “sin avisar”.
Imprevisto/a. Es un adjetivo y también, en masculino (imprevisto), un sustantivo. El significado coincide con los dos anteriores; pero es el único de los tres términos que puede ser sustantivo (…me ha surgido un imprevisto…).
Muy bien. Tengamos cuidado, por lo tanto, con esas dos locuciones adverbiales. Y sobre todo con una…
SÍ -> Llegó de improviso, nadie la esperaba.
NO -> Llegó de improvisto, nadie la esperaba.