Buenas tardes. A D. Miguel, además de verle en alguna ocasión paseando por la zona de El Campo Grande, en el año 1985 participé en la renovación del padrón de Valladolid, y tuve la suerte de realizar el de su domicilio. Me atendió su hija Elisa y tuve la ocasión de saludar y estrechar la mano a D. Miguel. Ambos muy atentos y amables. Gracias y saludos.