En el siglo XVII había en Inglaterra un juego de apuestas en el que los objetos o el dinero que se ponían en suerte se metía en una gorra (cup en inglés). Los dos apostantes introducían entonces una mano (hand en inglés) en esa misma gorra, en presencia de un árbitro, y dependiendo de si sacaban las manos abiertas o en puño, ganaba la apuesta uno u otro, según lo que se hubiese establecido previamente. Este juego se conocía como “hand in cup” (mano en la gorra, en español).
La expresión handicap pasó pronto a designar a los sistemas que permiten que un juego sea más equitativo, poniendo en desventaja al jugador que en principio tiene una ventaja sobre los demás, motivada por alguna desigualdad evidente (condición física, experiencia, edad…). Con el tiempo, el término empezó a utilizarse para referirse a discapacidades o inconvenientes de todo tipo.
En español el término “hándicap” es definido por la RAE como “desventaja o circunstancia desfavorable”.