Semántica legendaria: los merodeadores del conde Merode

Durante la guerra de los 30 años (1618-1648), en los Países Bajos, el conde Merode mandaba un batallón que poco a poco se ganó la fama de saquear a los campesinos de las aldeas (el “anti-Robin Hood”…). Sus pobres víctimas llamaban “merodeadores” a los soldados de Merode; mala gente que siempre andaba escondida y al acecho alrededor de sus humildes casas, para arrebatarles lo poco que tenían. El verbo “merodear” es, según la RAE«Vagar por las inmediaciones de algún lugar, en general con malos fines».