Ángel María de Pablos nos cuenta cómo conoció a Delibes
“Miguel Delibes, mi amigo”, por Ángel María de Pablos Tenía yo unos 10 años y mi padre era redactor jefe en “El Norte de Castilla”. Vivíamos en la tercera planta del […]
“Miguel Delibes, mi amigo”, por Ángel María de Pablos Tenía yo unos 10 años y mi padre era redactor jefe en “El Norte de Castilla”. Vivíamos en la tercera planta del […]
EN HOMENAJE A DELIBES Toda la familia, en general, éramos y somos devotos de Miguel Delibes. De hecho, aficionamos a nuestros hijos a la lectura a base de que leyeran
MI AMIGO MIGUEL DELIBES Era una mañana fría del invierno salmantino. Un servidor, entonces estudiante de Filología Románica, caminaba por la calle “la Rúa” camino de Anaya, cuando, al torcer
Sería a finales de los 80 o principios de los 90, poco antes de que el mini-cine Groucho cerrara sus puertas. Fui a ver la obra maestra de Roberto Rossellini
Sería el año 1982, el colegio que lleva su nombre en el barrio de la Victoria cumplía cinco años. Recuerdo que entró en nuestra clase junto con otras autoridades, nos
Concluía la década de los setenta y mis inquietudes adolescentes se diseminaban por el instituto de Bachillerato de Jávea (Alicante). Doña Pilar, profesora de Lengua y Literatura, se esforzaba por
Supe que existía un tal Delibes cuando era sólo un niño de diez años. Don Pedro, mi maestro de EGB, nos dijo que había una novela en la que una
Mis padres estudiaron Comercio en la calle de la Estación en Valladolid, dónde Delibes era profesor, así que en la orla de ambos, allí está él. Mi madre era una
Siempre he leído mucho, desde niño, y Delibes es uno de los escritores que más me ha marcado. Mi padre, que durante mucho tiempo tuvo su oficina en el arranque
A don Miguel lo vi en alguna ocasión paseando por la zona del Campo Grande, pero, además, en el año 1985 participé en la renovación del padrón de Valladolid y